Vecinos resienten problemas de agua, electricidad y transporte en el Área Metropolitana
Después de una contienda electoral tan esperada, Caracas, la eterna sultana del Ávila, tiene nuevos alcaldes, pero hereda de las gestiones anteriores los mismos retos urbanos por conquistar: se imponen el manejo eficiente de los desechos, la unificación del transporte público, la seguridad y la gestión de mejores servicios.
Un desafío común que descuella para los vecinos de los cinco municipios del Área Metropolitana es la construcción de un ideal compartido de ciudad, que permita a las autoridades abordar los problemas como un todo y aportar soluciones consensuadas para Baruta, Chacao, El Hatillo, Sucre y Libertador, que agrupa 64,90% de los residentes de la capital.
Antonio Corobo vive en Petare, una parroquia de Sucre, donde el pesuvista José Vicente Rangel Ávalos gobenará por tercera vez, y recita con soltura los problemas de la ciudad. Se queja por las fallas de aseo en un municipio que produce 1.100 de las 4 mil toneladas diarias de basura que se generan en Caracas y critica con arrojo las fallas de alumbrado y la ausencia de patrullaje. Al igual que sus compañeros de asiento, que frecuentan la plaza Sucre del casco de Petare, reclama políticas que faciliten el retorno de una vida apacible.
"Es necesario que se cumplan las leyes, que se frene el comercio informal, los bachaqueros, y que se atiendan los problemas cotidianos, el desabastecimiento", afirma Corobo con su verbo sencillo.
Sabe que se trata de los mismos problemas que resienten los más de 3 millones 333 mil habitantes de la metrópolis, que sufren por la paralización del 80% de la flota de transporte y se declaran asediados por la violencia que genera un promedio de 200 ingresos mensuales a la Morgue de Bello Monte, uno de los tres recintos de medicina legal que hay en Caracas.
Con un escenario político encontrado, en el que dos de las cinco alcaldías quedan en manos del partido de Gobierno, como es el caso de Libertador y Sucre, algunos citadinos ponderan la necesidad de establecer una mancomunidad entre las alcaldías y las instituciones nacionales para resolver los problemas de agua y electricidad en una ciudad que se desarticula.
De acuerdo con expertos como Norberto Bausson, ex vicepresidente de Operaciones de Hidrocapital, Caracas ahora solo recibe 13 litros de agua por segundo de los 18 mil que se bombeaban en 1999. Entre los retos que deben afrontar Gustavo Duque, primer mandatario de Chacao; Darwin González, de Baruta; Elías Sayengh, de El Hatillo, y Érika Farías, de Libertador, están el rescate de la convivencia, una tarea que pasa por la rehabilitación y suma de nuevos espacios.
"Caracas necesita ser querida, que sus alcaldes la traten con respeto, que la unifiquen, que se pongan de acuerdo y piensen más en ella, en su gente", dice Maribel Ponce, de Libertador. Los vecinos de Chacao, una jurisdicción que según el INE concentra 2,31% de la población del Área Metropolitana, pontifican la idea de replantear la urbe con una visión integral para el manejo de recursos.
A propósito de ello, el alcalde Gustavo Duque, quien dice responder a 27 organizaciones vecinales, espera que la gobernación de Miranda, presidida por el oficialista Héctor Rodríguez, incluya a los municipios metropolitanos en sus planes. Duque señala que tienen previsto revisar los horarios de aseo en esa localidad donde la basura desperdigada genera disgusto y que, al igual que los municipios vecinos, no tienen acceso a Las Mayas, una planta de transferencia de basura que es de uso exclusivo de Libertador.
La percepción que tienen los residentes de Caracas no es una idea infundada. La encuesta de Calidad de Vida de Mercer, una consultora global que evalúa las condiciones de vida en ciudades de todo el mundo, este año la ubica en el puesto 189, en un ranking de 231 capitales.
Entre otros aspectos, el estudio evalúa el acceso a los servicios de electricidad, agua potable, teléfono, transporte y vuelos internacionales. En torno a ello, el Instituto Metropolitano de Urbanismo de la Alcaldía Mayor reitera que urge avanzar de la mano de la tendencia global. Pero la aspiración tiene la ingobernabilidad en contra: se requiere coordinación entre los ayuntamientos y el Ejecutivo.
Según la Ley Orgánica del Poder Público Municipal, en su artículo 88, el alcalde debe cumplir la Constitución de Venezuela y las ordenanzas municipales y velar por la eficacia en la prestación de los servicios públicos. Tiene que dictar reglamentos, decretos y resoluciones, proteger y conservar los bienes y el medio ambiente. Ejecuta, dirige e inspecciona los servicios y obras municipales. Suscribe contratos, preside el Consejo Local de Planificación Pública y realiza las atribuciones en materia de Registro Civil. Ejerce la autoridad sobre la policía municipal. Concede ayudas y otorga becas y pensiones a los sectores más necesitados. Promueve la participación y la educación.
JULIO MATERANO / El Universal
Página Web - 2017/12/12
Fuente: http://www.eluniversal.com/