• +58 212 2388195
  • Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.
  • Lunes - Viernes 8:00 am - 4:00 pm

En el primer bimestre, el aumento interanual fue del 40,1%.

La venta de inmuebles en la provincia de Buenos Aires creció 25,23% en febrero pasado con respecto al mismo mes del año anterior, mientras que en el primer bimestre del año el aumento interanual fue de 40,1%.

Según informo el Colegio de Escribanos de la Provincia, en febrero se registraron 6.848 escrituras contra 5465 anotadas en 2017. En el primer bimestre de este año fueron un total de 13.821 contra 9.866 del año pasado.

Desde hace una década Buenos Aires no tenía esos registros. El aumento se explica, fundamentalmente, por los créditos hipotecarios UVA. En febrero crecieron 202% con respecto al mismo mes del 2017.

Así como en el primer bimestre aumentaron 228%. En enero y febrero de 2017 se anotaron en el Colegio de Escribanos bonaerense 1.988 hipotecas, en tanto que en enero y febrero de este año fueron 6.530. Un crecimiento exponencial.

Los créditos hipotecarios representaron este año el 52% de las escrituraciones.

De acuerdo con un informe del Banco Central, hasta marzo continuó la aceleración de los préstamos hipotecarios destinados al sector privado. En ese relevamiento se observó que 61% del saldo total de crédito hipotecario a las familias correspondió a financiaciones denominadas en UVA.

En la actualidad el crédito hipotecario representa un poco más del 1% del PBI. Todavía lejos del registro durante la convertibilidad que llegó al 6%.

Ahora sostiene el esquema esta participación en el mercado: el Banco Nación mantiene 46,7%; el Provincia 18,3%; Ciudad 7,3%, y los otros bancos el 27,6%.

Argentina todavía está lejos de los estándares mundiales en la materia. El crédito hipotecario representa en nuestro país el 13% del total del crédito al sector privado. En cambio en Uruguay, el porcentaje trepa al 23%, en Brasil el 45% y Chile tiene el equivalente al 79% de su Producto en créditos hipotecarios.

Aún desde esa rampa deficitaria, se percibe cierta consolidación del mercado inmobiliario en la provincia de Buenos Aires. En total se escrituraron 128.345 títulos de compra y venta el año pasado, 19,25% más que en 2016 donde el número total de escrituras fue de 103.628. Además se incrementaron las hipotecas, con un crecimiento de 61,67 % en relación a 2016.

Aunque todavía la inflación y ciertos desajustes en la economía retrae la demanda, el avance de los créditos hipotecarios nominados en UVAs encuentra un soporte en el atractivo de que la cuota se asemeja a la de un alquiler. Es una de las explicaciones porque superó los 65.000 millones de pesos en 2017.

De todas maneras, los deudores ya sacan cuentas de algunas desventajas. Si los índices inflacionarios continúan como hasta ahora habría una retracción.

Pruebas al canto: según el diario El Día, el Centro de Economía Política Argentina (CEPA) sostiene que durante el último año, la cuota y el capital adeudado se incrementó un 52 por ciento.

En el mismo período las tasas de interés se duplicaron, mientras que la devaluación complicó el acceso al crédito debido a la diferencia entre el monto otorgado en pesos y el precio de la vivienda en dólares cuando se realiza la operación. Y aunque el dinero prestado en créditos UVA aumentó más de 20 veces, se encendieron las alertas sobre la sustentabilidad del sistema.

Como el miedo no es sonzo, gerentes de bancos y legisladores debaten por estas horas un plan para que los tomadores de créditos hipotecarios UVA pague un seguro equivalente al 3% de la prima o cuota a pagar.

¿Cuál es el objetivo? Ese seguro aportaría al deudor una cobertura en el caso de que la variación de la inflación superara en más de un 20% la suba de los salarios medida a través del Coeficiente de Variación Salarial (CVS). El aporte iría a un fondo administrado por el Estado.

 

 


Rodolfo Lara / Clarín

Página Web - 2018/04/16

Fuente: https://www.clarin.com/


Los bancos subieron el costo de los préstamos y muchos potenciales compradores podrían quedar fuera del sistema.

 

Con el repunte de la inflación y la suba del dólar, el año empezó movido para los interesados en tomar créditos hipotecarios. Sobre esto, el Banco Nación, principal oferente de préstamos del mercado, anunció que a partir del 1 de mayo subirá la tasa de otorgamiento para alinearla con el resto de las entidades. Así, la cuota inicial se encarecerá y, en consecuencia, se requerirá un mínimo de ingreso más alto para poder acceder, lo que dejará a potenciales compradores fuera del sistema. Para limitar este impacto, desde el Gobierno planean rediseñar los subsidios a los créditos e impulsar un esquema de seguros para evitar que la cuota se dispare.

El Banco Nación subirá la tasa del 3,5 al 6,5% para los clientes y del 4,5 al 8% para los no clientes. Sobre esto hay que agregar la UVA que se rige por inflación. ElNación había salido el año pasado con una política muy agresiva de otorgamiento de créditos para darle impulso al sistema. Así, se llevaron 32.581 de los 65.000 préstamos entregados desde 2016. La expectativa para este año es llegar a 120.000 operaciones. Desde los bancos confían en que ni la suba de tasas —ahora en torno al 8,5 y 9% en el sistema—, ni el aumento de la inflación por encima de las paritarias le quitarán atractivo al producto. “Pese a todo será más conveniente sacar un crédito UVA que seguir pagando un alquiler que aumenta año tras año por encima de la inflación”, sostienen en el mercado. En el Nación, con las nuevas tasas, la cuota a 30 años cada $1.000.000 otorgado pasará de $5.067 a $7.338, lo que implica que los beneficiarios deberán tener ingresos mínimos de $29.353 para calificar, un 33% más que con las tasas previas.

El sistemaUVA es el caballito de batalla del Gobierno para sostener al mercado inmobiliario. El crédito se ajusta por inflación, por lo que la relación entre la cuota y el ingreso del deudor se mantiene estable a lo largo del préstamo. Con el repunte de la inflación en 2018, el temor de los deudores es perder poder adquisitivo y que la cuota se vuelva más difícil de afrontar.

Desde el Nación dicen que el crecimiento de los créditos UVA no se detiene. “Tenemos 83.000 solicitudes en trámite con distintos grados de avance y estimamos que a lo largo de este año el banco otorgará 40.000 préstamos en UVA”.

Sin embargo, desde el Gobierno analizan mecanismos para limitar el impacto de la suba: subsidios a medida desde el Procrear, seguros hipotecarios y nuevos mecanismos para avanzar con la securitización de carteras de créditos.

Pese a la incertidumbre que generan estos cambios, marzo fue un mes récord en el otorgamiento de préstamos hipotecarios: se concretaron operaciones por $12.000 millones.

A través del Plan Procrear se subsidian el 30% de los créditos UVA que otorga el sistema. En marzo se entregaron 3.188 subsidios, muy por encima del promedio de 2.500 operaciones mensuales que tuvieron en 2017. “Ya llevamos desembolsados más de $7.000 millones en subsidios para hipotecarios”, cuenta IvánKerr, secretario de Vivienda de la Nación y presidente delProcrear. Los subsidios van de $200.000 a $400.000, el equivalente al 30% del monto de la hipoteca promedio. Otro 60 a 65% lo aporta el banco y el 10 o 15% restante es el anticipo que debe poner el comprador.

“Venimos creciendo en cantidad de operaciones y la expectativa es que se va a mantener esta evolución”, dice Kerr.

—¿No les preocupa que la suba de tasas deje a mucha gente afuera de los créditos?

—No creemos que pase eso. El año pasado los ingresos aumentaron por encima de la inflación. El aumento de las tasas obedece a la necesidad de dar sustentabilidad y a que el sistema pueda mantener la rentabilidad que requiere.

El Gobierno está analizando algunas medidas para moderar el impacto de la tasas. Según explica Kerr, una de las alternativas que están evaluando desde la Secretaría de Vivienda es otorgar subsidios segmentados. Hasta hora, los subsidios Procrear son planos, pero en adelante podrían dar un subsidio mayor a los que tengan más dificultades para afrontar las cuotas. Otra alternativa sería generar seguros hipotecarios que permitirían que los bancos presten más dinero a un cliente que tiene una línea con Procrear. Este es uno de los puntos que se habilitaría a partir de la ley de mercado de capitales que se está tratando en el Congreso.

“Estamos trabajando en la ley de mercado de capitales y con ella hemos generado los vehículos para que pueda empezar a existir un mercado para securitizar las hipotecas y proveer fondeo. Esto ocurre en todos los países del mundo.Necesitamos esa normativa para que pueda registrar un sistema virtuoso”, apunta Kerr.

Maximiliano Coll, gerente de créditos del Banco Ciudad, indica que la entidad ya entregó 6.100 préstamos UVA. En el primer trimestre de este año cerraron 1.100 operaciones y tienen otras 2.400 en proceso de escrituración. “Prevemos superar los 20.000 préstamos hipotecarios UVA otorgados desde el lanzamiento en 2016 hasta el 2019 a través de las diferentes líneas para la vivienda que ofrece el banco”, sostiene.

En noviembre del año pasado, el Ciudad subió un punto la tasa para los no clientes y la llevó a 6,4%. Para los clientes está en 5,4%. A 30 años, la cuota inicial está en $5.655 y los ingresos del grupo familiar deberían ser de $22.620.

Diego Gato, gerente de banca hipotecaria del Banco Hipotecario, detalla que en 2017 la entidad generó cerca de $1.000 millones en hipotecas. “Vamos a originar $2.500 millones en hipotecas este año”. La estrategia de tasas del banco fue a contramano de la de los bancos públicos que apostaron a las tasas bajas. “Nosotros fuimos los primeros en tener una tasa más adecuada a la del mercado.Siempre estuvimos pensando en generar un mercado secundario de hipotecarios para que fuera sostenible. Con tasas de 5% es difícil securitizar la cartera”, cuenta Gato.

“Hoy todo el mercado está con tasas de entre 8 y 9%. La competencia se da más por los servicios y tiempos de otorgamiento que por el producto en sí. La tasa que teníamos el año pasado era del 7 u 8% y este año se fue a 8,5 y 9%. Creemos que lo que hicimos fue acorde a lo que el mercado estaba pidiendo. Para nosotros esta suba de tasas es una corrección menor.Para el sistema fue más alta, así que es posible que los demás bancos se vean más afectados que nosotros”.

Nuevas formas de fondeo

Desde los bancos aseguran que la suba de tasas tiene por objetivo mejorar las condiciones de fondeo para los créditos hipotecarios y lograr que el sistema sea “sustentable”. Para conseguirlo, la apuesta oficial es avanzar con la securitización, un esquema en el que las entidades les venden su cartera de préstamos a fondos de inversión que los provean de capital para que la rueda siga girando.

Para IvánKerr, secretario deVivienda de la Nación, la clave está en la ley de mercados de capitales que se está tratando en el Congreso. “Con esa ley estamos generando los vehículos para que empiece a existir un mercado de capitales para securitizar las hipotecas y que el fondeo provenga del propio mercado”, cuenta.

Kerr explica que en este esquema, los bancos podrían vender su cartera de préstamos, pero que esto no modificaría la situación de los deudores. “El deudor recibe el 100% de su préstamo y sigue estando endeudado con el banco en las condiciones en las que fijó el préstamo”. Los créditos UVA incluyen una clausula que establece que si la inflación supera por más de un 10% la evolución de los salarios, los bancos deberán ofrecerles a sus deudores la posibilidad de extender por un 25% el plazo original del préstamo. “En caso de que esta situación ocurriera, el deudor negocia con el banco en las condiciones ya fijadas. En todo caso, el riesgo sería para el fondo inversor, porque el repago del préstamos se extendería y tardaría más en recuperar su inversión”.

Maximiliano Coll, gerente de créditos del Banco Ciudad, cuenta que “el año pasado los bancos estaban muy líquidos y parte del fondeo de los créditos se hizo con fondos propios. Mirando para adelante, las entidades buscaremos diversificar las fuentes de fondeo, y ese camino estará dado por una mayor captación de plazos fijos a partir de tasas reales positivas, por la salida a los mercados de capitales doméstico e incluso externo, y por la securitización de carteras, comenzando por la de créditos personales y luego, las hipotecas”.

Diego Gato, gerente de banca hipotecaria del Hipotecario, dice que la entidad también explorará ese camino. “Las tasas actuales del mercado son más atractivas para la securitización. El inversor se basa mucho en la tasa de interés. Con tasas bajas y encima con la posibilidad de que el deudor renegocie plazos, el inversor no se siente tan cómodo”. Ante esto, una de las alternativas que manejan los bancos es implementar un seguro que cubra la diferencia entre el crecimiento de la inflación y los salarios para evitar recurrir a la extensión del plazo. “Eso da mayor seguridad al cliente y el costo del crédito no aumentaría tanto. A cambio, el deudor tendría la certeza de que nunca va a pagar una cuota que se desfase más del 10% de variación salarial/inflación”.

El Hipotecario lanzó el año pasado dos obligaciones negociables por $1.000 millones para fondear los créditos. Y están a punto de securitizar parte de la cartera, con una primera tanda de $500 millones. “Buscamos que la generación de crédito sea sustentable y para eso tenemos las tasas adecuadas. Los créditos a tasas bajas no se pueden securitizar”.

Desde el Gobierno también se viene trabajando para avanzar con los “créditos intermedios”, en los que los bancos financien a los desarrolladores de departamentos para lograr que aumente la oferta de unidades aptas para hiptecarios. “El Nación y el Ciudad están empezando a dar crédito intermedio a desarrolladores”, cuenta Kerr.

Al mismo tiempo, el Procrear continúa con el desarrollo de complejos de vivienda. Para este año, la meta es entregar 4.500 departamentos y el año que viene terminar de entregar 23.000 unidades . “En dos años ya llevamos entregadas cerca de 80.000 propiedades”, indica Kerr.

 

 


Annabella Quiroga / Clarín

Página Web - 2018/04/15

Fuente: https://www.clarin.com/


Un relevamiento mostró los valores básicos para una póliza y sus distintos adicionales.

La vivienda propia suele ser el bien más valioso del que disponen las familias. Al tal punto que, si la perdieran por una desgracia, como un incendio, es muy difícil que puedan recomprarla. O, al hacerlo, el daño sobre el patrimonio es altísimo.

Para cubrirse contra estos peligros, y poder volver más fácilmente al estado de cosas anterior a un siniestro que afecte la vivienda familiar, existen los llamados "seguros de hogar". Y cada vez son más los que buscan tranquilidad al contratarlos, con el atractivo de obtener una protección a cambio de un pago mensual accesible para familias de nivel medio.

¿Pero cuánto se paga? ¿Y qué tener en cuenta al contratarlo? Para orientar a los usuarios en estos aspectos, Acción del Consumidor (Adelco) elaboró un informe en el que ofrece algunos valores de referencia y consejos varios.

"Estos seguros -explican- ofrecen coberturas ante hechos como robos o hurtos de bienes, el incendio de la unidad o del edificio, o para situaciones en las que un vecino pueda exigirnos un resarcimiento por responsabilidad civil."

"En general, las coberturas protegen ante supuestos como el incendio del edificio o de su contenido, la necesidad de una vivienda alternativa por el incendio, la pérdida de bienes refrigerados, la necesidad de reponer bienes a nuevo, daños por filtraciones de agua, daños al al edificio por impacto de vehículos, robos dentro y fuera de la vivienda, y daños por caída de granizo", detallan, entre otros.

Tomando como referencia un monoambiente cuyo valor sea de $ 1.000.000, la entidad encontró seguros cuyas cuotas mensuales varían entre los $ 300 y $ 380, con topes indemnizatorios de hasta $ 50.000 a $ 70.000 en caso de robo o hurto en el domicilio.

En caso de incendio, agregan, una cobertura de este tipo repone el total del valor de la vivienda, y puede reintegrar sumas de $ 45.000 a $ 55.000 para el retiro de escombros, $ 250.000 a $ 300.000 ante el robo o hurto de lo que hay dentro de la vivienda y hasta $ 500.000 por responsabilidad civil.

Ante una rotura de cristales se puede cobrar $ 1.500 a $ 3.000, ante daños por agua $ 15.000 a $ 20.000, y por la pérdida de bienes refrigerados unos $ 3.000 a $ 4.000.

"A medida que sube la cuota mensual que uno puede pagar van aumentando los topes indemnizatorios", explican. Y señalan que existen distintos adicionales que se pueden contratar para asegurar otros bienes que estén en el hogar, en general no comprendidos en las coberturas estándar. Por ejemplo, para proteger una computadora ($ 30 a $ 150 al mes), una notebook ($ 65 a $ 75) o un televisor LED ($ 31 a $ 45).

 

 


Clarín

Página Web - 2018/04/13

Fuente: https://www.clarin.com/


Aunque la inflación aún no está en los niveles deseados por el Gobierno y es casi un hecho que la meta del 15% no se cumplirá este año, el plan Procrear que otorga créditos hipotecarios, en casi su totalidad indexados, registró en marzo un récord de escrituras. Según los datos a los que accedió LA NACION, el mes pasado se realizaron 3188 operaciones, el número más alto desde que asumió la presidencia Mauricio Macri .

Desde que se relanzó el programa con la nueva administración, y los beneficiarios dejaron de ser elegidos por sorteo al reemplazarse la selección por un sistema de puntaje que tiene en cuenta los ingresos y la condición del grupo familiar, las escrituras fueron en ascenso y pasaron de las 80 iniciales en enero del 2017 a las 3176 de diciembre de ese año. A partir de allí el número empezó a descender y, en enero último se registraron 2622. La tendencia se repitió en febrero cuando bajaron a 2316.

El promedio del valor de compra de propiedades, a través del Procrear, fue en marzo de 61.362 UVA, es decir $1.399.667 al valor actual o US$68.276. El subsidio promedio otorgado por el Gobierno a la vez fue de 12.793 UVA, es decir $292.064.

"Las operaciones del Procrear siguen creciendo a pesar del aumento en el costo de vida. De los cerca de 12 mil millones de crédito hipotecario que se erogaron en marzo, gran porcentaje de ese total fue de Procrear", dijo a este medio el secretario de Vivienda de la Nación, Iván Kerr.

Del total de créditos hipotecarios a nivel nacional, el programa oficial del Gobierno representa el 30% de operaciones, y el 20% en montos ya que el dinero máximo que se otorga son 2 millones 300 mil pesos, es decir US$112.195.

Tras la buena respuesta y la gran cantidad de postulantes, el Gobierno avanza además en una nueva convocatoria para el Procrear. "Vamos a abrir la inscripción en el primer semestre, posiblemente mayo. Planificamos hacer dos llamados en total en el año, una de la línea tradicional y otra del Procrear Ahorro Joven", dijo Kerr.

"La relación cuota-ingreso que está en el programa tiene un límite del 25% y hoy están pagando un 23%. Para la gente es aún la mejor solución. De hecho, el 95% de de los beneficiarios del optan por las UVA", agregó.

El funcionario además sostuvo que están trabajando para mejorar los detalles e incorporar la opción para que los postulantes puedan ahorrar el 10% requerido de inversión inicial en plazo fijo en UVA en el banco, tal como sucede hoy con el programa destinado a los jóvenes de entre 18 y 25 años, aunque en ese caso el mínimo requerido es el 5% de la tasación del inmueble.

"Queremos que los plazos fijos en UVA, que hoy son solo precancelables cada 180 días, sean más flexibles. Ese también es un requerimiento de los bancos al Central", señaló.

Kerr, que también se refirió además al aumento de las tasas para los créditos hipotecarios de Banco Nación, que pasarán de 3,5% a 6,5% a partir del 1° de mayo. Según aseguró a todos los seleccionados del programa ProCreAr Compra y Construcción que cuenta con la prea probación crediticia de esa entidad bancaria y hayan presentado la documentación completa de la vivienda a adquirir, se la mantendrá la tasa actual.

 

 


Diego Yañez Martínez / La Nación

Página Web - 2018/04/11

Fuente: https://www.lanacion.com.ar/


Respaldo, sí, pero con dudas. El proyecto de ley que impulsará el Gobierno para expropiar tierras donde se levantan 4228 barrios precarios en todo el país tiene un amplio apoyo de la oposición en el Congreso y de organizaciones sociales, pero genera cuestionamientos sobre cómo se financiará.

Uno de los artículos de la norma que busca darles el título de propiedad a los actuales ocupantes de esos inmuebles específica que el financiamiento será compartido entre la Nación, las provincias y los municipios. E incluso, los beneficiarios tendrán que pagar en parte los terrenos que recibirán.

"Lo vamos a discutir, pero queremos que cada uno se haga cargo de una parte", explicó una de las personas que trabajó en el proyecto que busca declarar de "utilidad pública y sujetas a expropiación" estas viviendas que, en su gran mayoría, no cuentan con título de propiedad y carecen de servicios básicos.

Además, desde el Gobierno advirtieron que los terrenos que se expropien "no se regalarán". Se implementarán "mecanismos accesibles" para que las familias beneficiadas -en total viven en los 4228 barrios populares unas 3.500.000 personas- compren la tierra.

El dato no es menor, ya que de la totalidad de barrios ocupados o tomados, el 61% pertenecen a propietarios particulares, el 7% son provinciales, el 13% son de los municipios y otro 13% no tienen información catastral que permita determinar a sus dueños. En el Gobierno aún nadie quiere hablar de cifras.

 

 

Mientras tanto, diputados de distintos bloques de la oposición se mostraron ayer a favor del proyecto del Gobierno, lo que le augura a la iniciativa un recorrido sin complicaciones en el Congreso. La propuesta será formalizada hoy con un proyecto que llevará las firmas de los diputados Mario Negri , jefe del bloque radical y del interbloque de Cambiemos ; Nicolás Massot , presidente de la bancada de Pro, y Elisa Carrió , jefa de la Coalición Cívica (CC).

Ante la consulta de LA NACION, los diputados Daniel Arroyo (Frente Renovador), Leonardo Grosso (Movimiento Evita) y Juan Cabandié (Frente para la Victoria) elogiaron la idea en general. Pidieron, de todos modos, esperar para conocer los detalles de la iniciativa.

"Este proceso tiene que ver con una transformación más profunda para estas familias, que viven en las villas en un estado de vulnerabilidad, porque es un paso a la integración real y definitiva, se trata de la posibilidad concreta de acceder a los servicios de agua, luz, asfalto, salud?, a un domicilio", dijo ayer la ministra de Desarrollo Social, Carolina Stanley, en declaraciones radiales.

Y agregó: "Es mucho más profundo que la obra de infraestructura en sí, tiene que ver con derechos muy básicos que tenemos todas las personas y que el Presidente quiere que tengamos todos".

Si bien cerca de Stanley, a cargo del relevamiento, anticiparon que el proceso llevará "muchos años", la meta que se fijó su equipo es que para fin del año próximo estén firmados todos los convenios con las provincias y los municipios incluidos en el Registro Nacional de Barrios Populares (Renabap). La urbanización de los barrios populares llevará más de una década, admitieron fuentes oficiales.

La aprobación de la ley es el paso fundamental para poder otorgar los certificados de vivienda, lo que le permitirá a las familias acreditar un domicilio. En una segunda etapa se les otorgará un título de propiedad sobre esa vivienda.

La negociación estará en manos de la Agencia de Administración de Bienes del Estado (AABE), a cargo de Ramón Lanús. El organismo deberá individualizar los inmuebles a expropiar, realizar las tasaciones e iniciar los juicios de expropiación.

Durante el trabajo, que duró un año y medio, también participaron organizaciones sociales como la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP), cuya cara visible es Juan Grabois; Barrios de Pie, Techo y Cáritas Argentina.

Ayer, desde las organizaciones sociales anunciaron que acompañarán y empujarán la sanción de la ley, pero también hubo quejas. Grabois fue claro: "Sin presupuesto no se puede llevar adelante, no se puede avanzar". Aunque aclaró que se trata de "una ley extraordinariamente importante porque establece una solución masiva para el problema de los asentamientos" (ver aparte).

Como adelantó ayer LA NACION, el proyecto de ley será el primer paso para urbanizar asentamientos en los que viven cerca de 3.500.000 personas. La medida abarca los hogares que integran el Renabap, que presentan graves deficiencias de infraestructura. El objetivo es declarar de "utilidad pública y sujetas a expropiación" estas viviendas que, en su gran mayoría, carecen de servicios básicos.

Con la colaboración de Gabriel Sued

 

 

 


Santiago Dapelo / La Nación

Página Web - 2018/04/12

Fuente: https://www.lanacion.com.ar/