Hoy es necesario defenderse ante el cambio climático y minimizar el gasto de energía
En Las Mercedes, Altamira, La Castellana y El Dorado se proponen falsos planes especiales que cambian la zonificación violando lo dispuesto en la Ley Orgánica de Ordenación Urbanística (LOOU Art. 46), Cada propuesta incluye una ordenanza exclusiva y como todas son idénticas, es muy fácil producir planes con muy poco esfuerzo.
En consecuencia la ciudad tendrá una colcha de retazos legales en lugar de una reglamentación general, enfoque opuesto al serio proceder adoptado en Maracaibo donde elaboraron la ordenanza de zonificación en base a lo pautado en el Plan de Desarrollo Urbano, tarea al parecer imposible en el sencillo municipio Chacao. Estos disparates urbanísticos al rezonificar, emanan de no reconocer que las ciudades exitosas cambian continuamente y que la tendencia mundial (y también nacional) va hacia concentrar población y generar regiones metropolitanas. De allí que las Ordenanzas de Zonificación sean textos estáticos, para preservar lo existente al menos por una década, esfuerzo contrario a la realidad. Lo procedente seria que contaran con flexibilidad para poder incorporar con transparencia variaciones, al menos las derivadas de cambios en otras normas aplicables en lo urbano, para lo cual bastaría con establecer la obligación de acatarlas, sin incluir detalles para evitar contradicciones si fueran modificadas. Ejemplos son las Normas sobre equipamientos urbanos, el Manual de Vialidad Urbana y las Normas Sanitarias.
Hoy es necesario defenderse ante el cambio climático y minimizar el gasto de energía, condiciones ignoradas en los recientes cambios de zonificación propuestos en Chacao y Las Mercedes, al igual que en el pseudo plan especial aprobado para Los Chorros. Al efecto las ordenanzas podrían prever incrementos en el área de construcción vendible a cambio de proponer volúmenes (balcones u otros) o tratamientos (techos vegetales) para crear sombras y disminuir la insolación. También con incrementos también se podría estimular la generación de energía propia o el aprovechamiento de las aguas pluviales y el tratamiento de las residuales, proceder acorde con las tenencias mundiales y muy apropiado para contribuir a mitigar el actual colapso de los servicios públicos. Por ahora, los propuestos cambios de zonificación disfrazados de planes especiales, conducen a pensar que quienes los fabrican y aprueban, desprecian la conservación y la mejoría del planeta. Ojala haya un Ministerio rector del desarrollo urbano que tome estas iniciativas, tal como ocurrió una vez aprobada la LOOU, al sancionar el reglamento y elaborar dos ordenanzas prototipo, una para edificar y otra para urbanizar.
Común en los recientes “planes” propuestos es la ausencia de disposiciones para adecuar las infraestructuras y los equipamientos a las demandas debidas a los aumentos de población, por lo tanto edificar de acuerdo con ellos violará el preciso Artículo 46 de la LOOU, aunque se alegue que son Planes Especiales (Artículo 49) cuyo “propósito fundamental” es defender o mejorar sectores específicos. Ninguna mejoría se percibe en El Paraíso, El Rosal, Las Mercedes y Campo Alegre, los cuatro cambios de zonificación ocurridos hasta el presente y, triste es anticiparlo, lo mismo cabe esperar en Los Chorros y en los otros pseudo planes especiales que intentan abrirse paso. Lo requerido son planes serios, con garantía de recursos para ejecutarlos, no retazos que resuelvan apetencias individuales y generen mayores carencias comunes.
VICTOR ARTIS / Últimas Noticias
Página Web - 2019/04/27