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Entorno Urbano: AGUAS Y ENERGÍA

Los objetivos de las sociedades humanas son lograr servicios públicos y niveles seguros y dignos de vida, afirma el arquitecto Víctor Artis en su artículo de opinión.

Objetivos de las sociedades humanas son lograr servicios públicos y niveles seguros y dignos de vida. Cualquiera sea la dimensión del grupo social, familia, tribu, edificio, urbanización, municipio, estado o nación, es implícito cubrir los costos con el esfuerzo de todos, principio pertinente para exigir responsabilidad y lograr excelencia. Las diferencias de costos entre ciudades, sean en aguas, energías, comunicaciones, movilidad o equipamientos, determinan su atractivo y su competitividad para prosperar y sustentarse. En nuestro ya ”pobre país rico”, estas nociones no aplican por ser más las aspiraciones a derechos que la disposición a contribuir. Creemos posible satisfacer las necesidades con dadivas extraídas de pozos petroleros y minas.

Proveer servicios públicos gratuitos o a precios irrisorios propicia el deterioro de los sistemas, el desperdicio por fugas y la tolerancia del consumo irresponsable. acudir al gobierno central en procura de recursos no es solución porque sus aportes llegan retrasados o escasos. Conveniente sería que los entes responsables de los servicios públicos tuvieran capacidad para operarlos (administración y manejo de redes), mantenerlos (cuido) y reponer componentes una vez cumplida su vida útil. Con estos rubros incluidos en el cálculo de las tarifas, reponer componentes elevaría la recaudación a montos cuyo valor debería ser preservado e incrementado con destreza financiera, amén de mantenerlos alejados de la avidez gubernamental por dinero donde “haiga”, como ocurrido en el INCE, BCV, PEDEVESA, fondos de pensiones y otros. Crear el mecanismo apropiado es materia para especialistas y al efecto hay ejemplos como Aguas de Lyon, empresa mixta que además de cumplir con eficiencia el suministro de agua potable, es una fortaleza económica. Similar ejemplo, pero nacional, fue la Electricidad de Caracas, que sobrevivía a pesar del persistente afán regulatorio de gobernantes, que creyendo ayudar a las mayorías, regalan lo ajeno pero comprometen la calidad de los servicios.

Recuperar el costo al proveer servicios es arduo ante desigualdades sociales extremas. Para mitigarlas se implantan subsidios, que deberían ser decrecientes, si tuvieran éxito las ofertas de generar prosperidad. Entre nosotros los subsidios son permanentes y generales, porque ni personas ni empresas pagan de acuerdo con tarifas suficientes para cubrir el costo del servicio que consumen, ni siquiera para operar y mantener. Aquí todo lo regalamos o premiamos, incluso gobernar sin eficiencia, origen y causa de la nula calidad urbana en las ciudades que más han crecido.

Si imagináramos el reinicio del país partiendo de cero, podríamos establecer como principio general el consolidar una sociedad eficiente y competitiva. Ello conduciría, por ejemplo, a conformar regiones metropolitanas en base a una ciudad principal y otras menores, a manera de satélites o centros de servicios para apoyar la producción intensiva, tanto de alimentos como de minerales u otras actividades (turismo p.e.) La ciudad principal concentraría la mayor cantidad de empleos en servicios y producción industrial y generaría innovaciones gracias al intercambio de ideas y a centros educacionales donde acopiar conocimientos, incrementarlos (investigación) y divulgarlos Cada región metropolitana sería capaz de sustentarse. Se protegería la biodiversidad, aun emprendiendo obras magnas para dominar las aguas y mejorar la productividad de los suelos. Con progreso y empleos de calidad podría ser moderado el gasto no reproductivo en subsidios. Prevalecería la descentralización.

La alternativa cómoda seria tratar de volver al país del pasado, con su dispersión de pueblos asentados de acuerdo con la economía de la etapa colonial, muchas actividades rurales de subsistencia y desperdicio de recursos generados en ciudades dinámicas para subsidiar poblados y las burocracias improductivas. Un país centralizado. Son opciones diferentes. ¿Qué deparará el futuro?

 

 


VICTOR ARTIS / El Universal

Página Web - 2019/03/30

Fuente: http://www.eluniversal.com/