La Cámara Venezolana de la Construcción alertó sobre las severas fallas en el suministro de cemento, cabillas, mallas planas y alambre
El ritmo de ejecución de las obras de infraestructura es muy lento o está paralizado debido a la falta de disponibilidad de materiales y al incumplimiento de pago a las constructoras, afirmó Jaime Gómez, presidente de la Cámara de la Construcción. Desde hace tres años el gobierno les adeuda 10 millardos de dólares.
Aseguró que hay severas dificultades con el suministro de cemento, cabillas, mallas planas y alambre. Aunque el gobierno ofreció importar los insumos la promesa todavía no se ha concretado.
Exhortó al gobierno a que antes de emprender nuevas obras honre los compromisos adquiridos para concluir los proyectos que están en desarrollo. Entre los trabajos pendientes están la planta de cemento en el sector Cerro Azul, el ferrocarril Puerto Cabello-La Encrucijada, la autopista San Cristóbal-La Fría y el Metro de Valencia Línea 2.
El gremio propone la creación de asociaciones público-privada en las que se establezca una alianza entre el gobierno y empresas del sector privado para el mantenimiento de las construcciones públicas y para la ejecución de nuevos proyectos. “Se trabajaría con financiamiento mixto, compartiendo riesgos y beneficios”, indicó.
Inversión. En un estudio de opinión, presentado por la cámara, 67,6% de los consultados respondió que estaría de acuerdo con la aplicación de un modelo de participación público-privada para la construcción y administración de vías, puertos, ferrocarriles y aeropuertos.
Gómez señaló que el Ejecutivo invierte 2,5% del producto interno bruto en infraestructura pública, sin embargo se requiere por lo menos 7%.
La cámara propone generar procesos de licitaciones para las obras de infraestructura, garantizar la igualdad de oportunidades y condiciones para las empresas venezolanas frente a las extranjeras, asegurar la disponibilidad de recursos para la ejecución de proyectos por períodos mayores de un año, crear mediante ley un fondo o banco nacional de infraestructura; y generar las condiciones para renovar el parque de maquinarias, pues 75% de los equipos están obsoletos desde hace 25 años.