Charallave. Con la aspiración de poseer algún día una vivienda digna están más de 20 familias de la comunidad Los Mangos, del sector La Flor de La Canela en Ocumare del Tuy, municipio Tomás Lander.
“A causa del déficit habitacional para los ocumareños y como consecuencia de la necesidad que atravesábamos un grupo de vecinos, tuvimos que construir las casas en madera, zinc y cartón piedra”, acotó la pobladora Dayana Blanco.
Acotó que han llevado proyectos y oficios a la Alcaldía de Lander, Gobernación de Miranda y el ministerio solicitando los programas Suvi y Remavi, y no han recibido ayuda.
“Hace ocho años sólo tres familias fueron adjudicadas por el gobierno en Jardines de Betania. Al resto de los vecinos nos ofrecieron adjudicarnos en otros complejos habitacionales, pero todavía seguimos esperando. Estamos de brazos a torcer”, aseguró Blanco.
Yeimara Parra, habitante de la localidad, explicó que cuando cae un aguacero se la ven difícil, debido a que el río Ocumarito y una quebrada sin embaular crecen, y las aguas invaden las viviendas.
“De noche, cuando comienza a lloviznar, tronar y relampaguear, nuestra señal es la luz de una linterna, que alerta sobre el crecimiento de las aguas del río y la quebrada”, refirió.
Parra indicó que en el sector hay ocho casas improvisadas, las cuales no cuentan con baños y los pisos son de tierra. Tampoco tienen tuberías de agua potable y servidas.
El alcalde Julio César Marcano conversó vía telefónica con ÚN y explicó que la comunidad será tomada en cuenta para el programa Barrio Nuevo Barrio Tricolor.
“Pedimos paciencia a los vecinos, pues trabajamos para mejorar su calidad de vida”
Rosángeles Pinto, residente de la zona, enfatizó que tan fuerte es la corriente de agua de los cauces, que arrasa con los bambúes del lugar.
AIRAMY CARREÑO ESPEJO - INTERPREN / Últimas Noticias
Impreso Digital - 2014/08/25