Más de 900 familias del sector El Caimito están afectados por falta de suministro de agua potable desde hace ocho meses y no encuentran soluciones, ni siquiera protestando.
La semana pasada, un grupo de vecinos decidió cerrar la avenida Paseo Caroní para exigirle a la Hidrológica del estado Bolívar (Hidrobolívar) que se restituya el servicio de agua por tuberías y que mejoren la calidad del agua de las cisternas gratuitas. Cinco días después, siguen sin respuestas.
Jorge Navas, vecino del conjunto residencial Parque Aventura, denunció que después de la manifestación civil, Hidrobolívar ha reducido el número de cisternas gratuitas hacia la comunidad. En cinco días han recibido solo dos de estos camiones, cuando antes podían recibir hasta seis.
El miércoles pasado, los afectados abrieron el paso de la protesta luego de que la estatal acordara gestionar una reunión de la mesa técnica de agua para el viernes 1 de diciembre con su nuevo presidente, Gustavo Imery. Nunca se realizó.
A la espera de reparación
Hidrobolívar sostiene que el nulo servicio de agua potable que afecta a El Caimito se debe a una fuga que hay en una tubería localizada debajo del elevado de Alcasa, y que comenzarán a reparar este 11 de diciembre.
“Ellos se mantienen diciendo eso, pero esa fuga tiene más de un año. La van a reparar justamente un día después de las elecciones (municipales). Sentimos que hay algo político en esa decisión”, precisó Navas.
La gerencia de Hidrobolívar responde que se trata de una fecha consensuada con las empresas básicas de Puerto Ordaz, pues el corte del servicio hídrico afecta sus operaciones y, para la reparación, se requiere de una parada con 100 horas de duración. Es decir, 4 días y cuatro horas de completa sequía para todos los sectores que se surten del Acueducto Industrial.
La fuga de agua bajo el elevado de Alcasa desperdicia el 30 por ciento del caudal que sale del mismo acueducto, razón que mantiene a más de 900 familias de El Caimito sin agua potable. Además, falta de renovación oportuna de equipos dentro de la planta también dificulta el bombeo de agua con suficiente presión a todas las zonas.
A la espera de las reparaciones, los vecinos deben gastar más de 17mil bolívares semanales para tener agua potable. En el conjunto residencial Parque Aventura, una cisterna cobra 200 mil bolívares para recargar el tanque de 10 mil litros de agua. Esto alcanza para un solo día de abastecimiento. Dividido entre 80 apartamentos, el gasto semanal es de 17.500 bolívares por vivienda, subsistiendo con agua recogida en pimpinas una vez al día.
“Lo ideal es que, por lo menos, Hidrobolívar nos mande más cisternas gratis para que nosotros podamos llenar el tanque dos veces al día y estar mejor. Queremos negociar, porque nos damos cuenta que si protestamos, nos cierran las puertas”, concluyó Navas.
Oriana Faoro / Correo del Caroní
Página Web - 2017/12/04
Fuente: http://www.correodelcaroni.com/