Un grupo de vecinos de Hialeah expresó su rechazo a la construcción de un nuevo complejo residencial y comercial de 10 pisos en un área donde actualmente operan establecimientos médicos de un solo piso en el oeste de esa ciudad.
El proyecto de unos $20 millones que pretende desarrollar un médico de Miami Lakes contempla la construcción de 80 apartamentos de un máximo de dos dormitorios y para personas mayores de 55 años, dos pisos de unos 220 estacionamientos vehiculares, además de oficinas y consultorios.
“Un proyecto de esta magnitud provocará un gran impacto en nuestro vecindario”, criticó la vecina Milagros Capó. “Figúrese, si el tráfico de por sí ya es pesado en la zona, con este proyecto nos condenan. ¡Diez pisos es demasiado para esta área!”.
El proyecto del doctor José Orcasita fue presentado por su abogado, Ceasar Mestre, durante una reunión vecinal organizada el pasado lunes 10 ante los residentes del área. Dos días después, casi una veintena de vecinos acudió a una sesión pública de la Junta de Planificación y Zonificación para rechazar el proyecto.
Sin embargo, aquella noche, Mestre decidió no presentarlo ya que la noche previa, el Concejo de Hialeah había aprobado enmiendas al Código de Zonificación de la ciudad, las cuales entre otros cambios reduce los números de estacionamientos vehiculares.
La vecina Ileana Abreu dijo que con las normas vigentes hasta la semana pasada, el número requerido de estacionamientos en el proyecto de Orcasita era de 301. No obstante, con las nuevas normas la cifra quedaría reducida a poco más de 200.
“Un edificio de este tamaño necesitará cientos de estacionamientos no sólo para los residentes sino para clientes, empleados y visitantes”, dijo Abreu. “Las autoridades deben proteger los intereses de los vecinos, no sólo el de los desarrolladores”.
Aquella noche, una de las sorpresas de la Junta de Planificación y Zonificación de Hialeah fue la presencia de Jorge González, quien en julio del 2012 fue una de las tres personas que acudió a una misteriosa visita al apartamento de la boletera Deisy Cabrera, horas después de ser detenida por la policía con boletas con votos fraguados en uno de lo más recientes escándalos de fraude electoral que salpicó a importantes figuras políticas de Miami-Dade.
Desde noviembre, González reemplaza a Jesús Hernández en la Junta de Planificación y Zonificación de Hialeah, por recomendación de la concejal Vivian Casals Muñoz. González reiteró que en aquella oportunidad sólo había ido a llevarle un “pan con bistec” a Cabrera, quien al menos fraguó la boleta de votación de una anciana que padecía de una enfermedad terminal y que se encontraba internada en un asilo.
“Jorge nunca ha sido acusado de nada”, dijo Casals Muñoz, quien también acudió aquella misteriosa noche a la vivienda de Cabrera. “Jorge tiene la capacidad y la integridad para formar parte de esa Junta”.
Mestre dijo que independientemente de evaluar los nuevos cambios a las normas de zonificación, buscará implementar un compromiso con la Ciudad de Hialeah para que el proyecto considere sólo un estacionamiento por cada uno de los 80 apartamentos.
“Vamos a comprometernos a que cada uno de los 80 apartamentos solo tenga un carro”, dijo Mestre , quien además es concejal de la vecina ciudad de Miami Lakes. “Estamos tratando de hacer lo mejor posible, sin molestar o estorbar a los vecinos y traer un proyecto bien bonito. En mi opinión personal esto lo que va a hacer es subir el valor de las propiedades en la zona”.
Según Mestre, el proyecto también contempla habilitar en el quinto piso un centro de asistencia para 41 ancianos, además de una piscina, y centro de esparcimiento para los residentes.
“El doctor Orcasita quiere hacer algo muy bonito […] porque está pensando en retirarse. El vive en Miami Lakes y sabe que cuando se retire no va a querer seguir en su casa”, dijo Mestre. “El quiere hacer algo muy lujoso y ha hablado con sus vecinos y ya varios tienen planes de irse a vivir a ese edificio”.
Para el vecino Henry Pernas, dueño de una contigua casa de empeño, el mayor problema de aprobar el proyecto es el impacto vehicular en la avenida 12 y las calles aledañas.
“Los estacionamientos previstos para ese edificio no serán suficientes y quienes sufrirán serán las propiedades cercanas”, dijo Pernas. “Creo que las autoridades deben tener en cuenta este serio problema y asumir la defensa de la comunidad”.
ENRIQUE FLOR / El Nuevo Herald
Página Web - 2014/02/17
Fuente: http://www.elnuevoherald.com