Más de un susto ha pasado José Antonio Carrasco Castellar desde que vive en El Cielito, una invasión que colinda con el sector Las Delicias de La Esperanza y que se asoma en las faldas del cerro de La Popa.
Así como decenas de asentamientos más que bordean este sector en riesgo, su casa se ha llenado de barro, piedras y ha detenido grandes proporciones de piedras que se han desplomado del cerro con el paso del tiempo.
Ahora, tras la fractura del Salto del Cabrón, una roca de 80 toneladas que desde hace más de un mes amenaza con desprenderse, para él y toda su familia el miedo está latente.
“Vivo hace 45 años en El Cielito y he visto cómo se han construido nuevas invasiones en el cerro de La Popa. Ya eso es el pan de cada día.
“Por mi casa había otras 40 viviendas, pero las han ido reubicando. Ahora solo hay seis, y aunque son pocas, las mismas condiciones de La Popa nos han puesto al borde de la muerte. Mi hija se ha quedado atrapada en medio de piedras y yo he tenido accidentes tratando de acomodar la estructura de la casa para que no se desplome y no le caiga encima al rancho del vecino”, le contó Carrasco Castellar a El Universal.
A la espera
Laura Mendoza, directora de la Oficina de Gestión del Riesgo, le dijo a este medio que desde ya se adelanta un censo para saber con exactitud el número de invasores en toda la ciudad, especialmente La Popa.
“El primer censo en cuanto a invasiones lo hizo Corvivienda en el 2009. En ese entonces se estableció que había 6.750 viviendas bordeando el cerro de La Popa, entre lotes privados e invasiones.
“Al día de hoy se adelanta un convenio para que en los próximos tres años se realice un censo de caracterización de asentamientos en zonas de riesgo de toda la ciudad. Este empezará en la Localidad Uno, iniciando por La Popa”, explicó la funcionaria.
MARYLIN MARTÍNEZ MARTÍNEZ / El Universal
Página Web - 2017/04/27
Fuente: http://www.eluniversal.com.co