A este dato del 2016, revelado por Camacol, hay que sumarle el potencial de las exportaciones.
El impacto de la devaluación, que ha tenido una lectura negativa por parte de representantes de varios sectores, se revirtió para la construcción, sector que lo ha aprovechado, con el fin de mover negocios en el país.
Así lo revelaron varios voceros de la industria, quienes señalaron que al momento de importar se empezaron a castigar los presupuestos de las compañías, especialmente por el alza del dólar, que encareció los productos procedentes del exterior.
Y aunque muchas empresas que desarrollan obras en los estratos altos han asumido la situación –debido a que las mismas características de los proyectos lo requieren– también han empezado a incluir materiales nacionales, que nada tienen que envidiarles a los que vienen del extranjero.
Al respecto, Sandra Forero, presidenta de la Cámara Colombiana de la Construcción (Camacol), reveló que el desarrollo de edificaciones en el país produjo casi $78 billones el año pasado y, con esto, la demanda de insumos sumó $34 billones.
“Esto, en los últimos seis años, ha representado un crecimiento de 67%”, destacó la directiva ayer, durante el lanzamiento de Expoconstrucción & Expodiseño, que se inaugura el 16 de mayo en Corferias (Bogotá).
Forero recordó, además, que las posibilidades son más grandes, si se tiene en cuenta que la política de Estado presenta una apuesta importante en vivienda y otros usos, como infraestructura educativa.
Sobre el mercado de vivienda, Martha Moreno, gerente de Camacol, regional Bogotá Cundinamarca, señaló que para atender la demanda, la industria nacional se está acomodando a los tiempos entre los lanzamientos y las iniciaciones de las obras, que ahora son un poco más largos.
Esto, de paso, también ha generado ajustes en los tiempos de la producción de los insumos y acabados nacionales, a los cuales identificó como “de altos estándares”.
En esto coincide Juliana Villegas, vicepresidenta de Exportaciones de ProColombia, quien a la dinámica nacional le agregó el buen desempeño de los envíos a otros países.
“Los materiales se han ganado un espacio en la preferencia de los empresarios de otros lugares del mundo, porque no le están apostando a lo barato, sino a lo bueno; esto incluye calidad, capacidad de respuesta e inmediatez ante los requerimientos de quienes los adquieren, y nuestra industria tiene eso a favor”, enfatizó.
Portafolio
Página Web - 2017/05/09
Fuente: http://www.portafolio.co