La ilusión que miles de medellinenses tienen de ver el tranvía de Ayacucho en marcha, parece ir en contravía con el temor que, al menos, 70 familias sienten de ser desplazadas por las repercusiones de las obras, del barrio en el que han vivido toda su vida.
Con el objetivo de construir el trazado del sistema tranviario, los ingenieros iniciaron, hace aproximadamente un año, explosiones con dinamita para romper el asfalto y piedras en la vía.
Según moradores del sector San Luis del barrio Alejandro Echavarría, esas detonaciones generaron grietas en las paredes de sus viviendas y 40 familias recibieron orden de evacuación por parte del máximo organismo de prevención de desastres de Medellín, Dagrd. Habitantes de otras 30 casas también dicen tener daños en sus inmuebles.
Aunque inicialmente las directivas del Metro, dueña del proyecto del tranvía de Ayacucho, prometieron a los afectados la reparación de las averías y ofrecieron el pago de arriendo a los afectados hasta que regresaran a sus casas, dicen los habitantes que ahora los están conminando a vender las propiedades porque las casas serán demolidas.
A Berta Toro, hace poco más de un mes, la empresa de transporte le paga 650.000 pesos de arriendo en una casa de Buenos Aires, luego de que le recomendaran salir de la vivienda en la que estuvo los últimos 32 años de su vida.
“Yo misma tuve que buscar el fiador y acomodarme, con ese dinero, a una vivienda que no es de las características de mi propiedad”, aseguró, en tanto añadió que le dijeron que no seguirían dándole el auxilio, y que en los próximos días le anunciarían qué sucederá con su antigua casa.
Metro estudia demoler
Con derechos de petición, representantes de la comunidad afectada pidieron al Metro la intervención para solucionar la problemática de la afectación de las viviendas y devolverles las casas.
“Tenemos 76 reportes de viviendas con afectaciones, de las cuales 44 están siendo atendidas en arrendamiento temporal”, dijo John Fredy Giraldo, líder de San Luis.
Ante la solicitud, Claudia Restrepo, gerente del Metro, admitió a los reclamantes que era poco probable que esas casas se puedan reparar debido a la gravedad de los daños.
“Si las personas quisieran volver a ese lugar, estamos hablando de que tenemos que tumbar las casas y volverlas a hacer (...)”, acotó.
Restrepo, explicó que, teniendo en cuenta que la reparación es remota, deberán tumbar y volver a construir para lo cual comprarían a las familias las casas o promoverán un desarrollo urbanístico.
“Si la familia dice: no me quiero ir de la zona, la idea es que se les compense con una vivienda de las que se construyan”, agregó Restrepo en una reciente reunión con la comunidad, en donde les negó la posibilidad de levantar réplicas de las casas que había.
Esa posibilidad fue rechazada por Juan Carlos Bustamante, quien compró una casa en San Luis hace dos meses por 140 millones de pesos y hoy no puede quedarse allí.
“Nosotros decidimos, desde hace años, vivir en estas casas y ahora nos quieren llevar a apartamentos. Es como una especie de destierro”, enfatizó.
En medio de la incertidumbre de la comunidad, las obras continúan a buen ritmo y aunque las detonaciones ya no se sienten, la demolición de las viviendas parece ser inminente.
ANTECEDENTES
Concejo pidió acciones legales
Concejales, en sesión plenaria, solicitaron el viernes pasado entablar acciones legales por las anomalías encontradas en el proceso de construcción del tranvía de Ayacucho.
Por una parte, el concejal Miguel Andrés Quintero, dijo que con las implosiones para su construcción muchas propiedades se han visto afectadas estructuralmente.
“El corporado, Alejandro Guerra, estableció que dinero que el Municipio ha perdido dinero por los malos diseños que realizó la empresa Idom.
“Los diseños contratados con Idom arrojan deficiencias que superan el 80 por ciento”
VÍCTOR ANDRÉS ÁLVAREZ CORREA / El Colombiano
Página Web – 2015/06/09
Fuente: http://www.elcolombiano.com