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La erosión marina avanza sin control en costas de Córdoba (COLOMBIA)

El problema es más complicado en límites entre Antioquia y Córdoba. Mar se ha tragado 40 kilómetros.


En el corregimiento de Cristo Rey, perteneciente al municipio de Los Córdobas, que se convierte en la línea divisoria entre el Urabá Antioqueño y Córdoba, se concentra uno de los puntos más críticos de erosión marítima.

 

En lo corrido de este año 50 familias han tenido que abandonar sus casas y buscar refugio entre vecinos y familiares, por la destrucción de las paredes y techos que reciben el impacto que producen las olas acompañadas de fuertes vientos. En algunos casos las casas yacen en el fondo del mar porque fueron arrastradas por el fuerte oleaje.

 

El peor problema lo viven los habitantes del barrio Minuto de Dios, donde se evidencia con mayor fuerza el problema. Desde el pasado 9 de abril, 18 familias tuvieron que buscar refugio en el único lugar que queda para albergar a los damnificados: la escuela del sector. Allí ocuparon los salones de clases con camas, ollas y algunos electrodomésticos, sumando así otro problema con la suspensión de las clases.

 

“Hemos perdido nuestras casas porque el mar se está robando la tierra, y el Gobierno no hace nada para solucionar el problema”, dijo Danis Ubarnes, líder cívica de la zona y quien ha liderado el proceso de reubicación temporal de las familias afectadas.

 

“Necesitamos alimentos, medicinas y mucha agua, pero principalmente requerimos que el Gobierno nos mire porque estamos solos en esta tragedia”, aseguró.

 

No desconoce la atención que han recibido de autoridades locales como las alcaldías de Los Córdobas (Córdoba) y Arboletes (Antioquia) con ayudas temporales, pero dejando de lado la solución definitiva.

 

A ello se suma, la disputa territorial que mantienen las gobernaciones de Córdoba y Antioquia, por la legalidad de la línea divisoria, la cual está perdida precisamente en el sector de la erosión, suspendiendo así la ayuda gubernamental por la falta de esclarecimiento territorial.

 

El problema, que tiene cerca de 10 lustros, se ha agudizado en los últimos cinco años, debido a los fenómenos climáticos. Son cerca de 40 kilómetros de playa los que han desaparecido mientras el mar gana espacio territorial.

 

Por ello, exigen la construcción de espolones y recuperación de playas para detener la furia del mar; al tiempo que piden la reubicación de sus viviendas en lugares seguros y estables.

 

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GUDILFREDO AVENDAÑO M. / El Tiempo

Página Web – 2015/04/15

Fuente: http://www.eltiempo.com