• +58 212 2388195
  • Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.
  • Lunes - Viernes 8:00 am - 4:00 pm

Municipio en Santander se está hundiendo por filtraciones en el suelo (COLOMBIA)

Más de 600 viviendas afectadas. La gobernación destinó $ 29.000 millones para nuevo alcantarillado.

 

Desde hace más de dos años, María Elena Rueda decidió, con su esposo, cortar el servicio de energía eléctrica por miedo a que un nuevo movimiento de tierra desprenda las paredes de su casa y ocasione un incendio.

 

Tres habitaciones de su vivienda presentan profundas fisuras y hundimientos en el suelo ocasionados por las filtraciones de agua que en Vélez (Santander) afectan a más de 600 viviendas.

 

“Vivimos con mucho temor”, repite María Elena mientras recorre la casa adornada con cortinas blancas que disimulan las grandes grietas de las paredes.

 

El temblor del 10 de marzo pasado empeoró la situación de esta familia, que en la noche usa velas para alumbrar el suelo desnivelado que cada día se fractura más por la humedad.

 

El cuarto que habitaba su hija mayor está completamente forrado en pliegos de papel bond porque le daba miedo ver las profundas aberturas de las paredes.

 

“Después del sismo, se fue porque no quería que la casa se le viniera encima”, contó María Elena.

 

El ingeniero civil Elkin Suárez, funcionario de la Empresa de Servicios Públicos de Santander (Esant), explicó que el antiguo alcantarillado y la placa de paja sobre la que se sitúa Vélez, conocido por sus microempresas de bocadillos, hacen que sea susceptible a erosiones y remociones de masa.

 

“El tipo de alcantarillado que tiene el desagüe, por ser de tipo combinado, está diseñado para conducir aguas negras, industriales y lluvias, lo que ocasiona fugas por la cantidad de líquido que circula por estas tuberías”, puntualizó Suárez.

 

Por la situación que se vive en la casa de María y la de los habitantes de 9 barrios, los afectados instauraron una acción popular en un juzgado de San Gil que en septiembre del 2011 falló a favor de los reclamantes exigiéndole al municipio construir una nueva red de alcantarillado.

 

En segunda instancia, el Tribunal de Santander confirmó la decisión tras certificar que en el municipio, situado a 230 kilómetros de Bucaramanga, han aparecido más grietas, levantamiento de pisos e inundaciones en varias viviendas por las constantes fugas.

 

Solución a la vista

 

Para cumplir el fallo judicial y garantizar la estabilidad de las casas afectadas el gerente de la Esant, Edwin Ballesteros, dijo que la gobernación invertirá 29.521 millones de pesos en la construcción de una nueva red de desagüe que permita superar la situación en las que se encuentran las casas, andenes, calles, parques, el hospital y el sector industrial afectados por las filtraciones.

 

“La inversión se hará para solucionar la situación de 13.000 familias que viven en este municipio. La obra tendrá como periodo de ejecución 12 meses y comenzaría antes de junio próximo”, expresó el funcionario.

 

Yaneth Grandas, alcaldesa de Vélez, dijo que en un censo realizado por la administración se determinó que, por ahora, 71 familias deben reubicarse. “Se adquirió un lote donde se construyen viviendas para las personas que prácticamente no tienen donde vivir”, agregó Grandas.

 

A dos horas y media de Vélez se encuentra el frío municipio de Sucre (Santander), al que se llega a través de una vía destapada y en malas condiciones, y en donde se registra un fenómeno similar.

 

Se han invertido 1.200 millones de pesos de la primera fase de un nuevo alcantarillado pues las fachadas de las casas ya presentan fisuras y en las calles se registran hundimientos de tal proporción que en diciembre del 2014 una calle cedió fácilmente ante el peso de un camión que quedó incrustado en un hueco.

 

 

 


SILVIA VIVIANA SANTAMARÍA / El Tiempo

Página Web – 2015/03/24

Fuente: http://www.eltiempo.com