Con cinco mil beneficios, que serán abiertos para poder postular la primera semana de enero, debutará el nuevo subsidio de arriendo en todo el país. El beneficio se extiende por cinco años y entrega 3 UF ($70 mil) por tres años y luego 2,5 UF ($58 mil) durante los dos siguientes a familias encabezadas por personas de hasta 30 años, que tengan hasta 13.484 puntos en la Ficha de Protección Social, es decir, que sean de un perfil vulnerable o emergente. Ellos podrán postular en los Serviu del país o, a través de la página web del Minvu, con un ahorro previo de 4 UF ($92 mil), que será usado luego para financiar el mes de garantía. "Se busca dar flexibilidad y una oportunidad de movilidad laboral entre distintas ciudades. Además, es una herramienta de promoción social porque, mediante un apoyo a la renta, las familias pueden optar por viviendas de mayor estándar sin generar un impacto en el presupuesto familiar", explica el ministro de Vivienda y Urbanismo, Rodrigo Pérez. El beneficio, además, permite que los beneficiarios acumulen puntaje adicional, si luego deciden postular al subsidio de clase media (DS-1) para comprar una vivienda. Los postulantes seleccionados deberán validar un contrato de arriendo ante el Serviu. Luego, este servicio depositará mensualmente el subsidio a una cuenta del BancoEstado, en forma complementaria al alquiler mensual que debe pagar el arrendatario. El beneficio social solo permitirá alquilar viviendas por hasta $200 mil, ubicadas cerca de los servicios y el transporte público y en un buen estado de conservación. Así se busca que puedan localizarse cerca de las oportunidades de empleo. Esto no suele suceder con los nuevos propietarios de viviendas. Según datos de un estudio realizado por el Banco Interamericano del Desarrollo, del total de casas y departamentos construidos para familias de escasos recursos, entre 2006 y 2011, sólo el 8% se levantó dentro en la zona céntrica del Gran Santiago, debido a los altos precios de los terrenos, lo que demuestra que los subsidios de propiedad siguen expulsando a las familias vulnerables a zonas periféricas. Esta misma situación, según el sociólogo y académico del Instituto de Estudios Urbanos de la UC Francisco Sabatini -que participó en un estudio sobre el mercado del alquiler- podría generar distorsiones. "Un instrumento como éste, que subsidia a la demanda, también se descarga en el aumento del precio de los suelos. Como no está complementado con una política de expansión a la oferta, puede generar pocas posibilidades de aplicarlo. Hoy es difícil encontrar arriendo en el Gran Santiago y las expectativas que generan los subsidios se convierten en fenómenos especulativos", opina. ¿Cómo resolverlo? A su juicio, "se debe generar un sistema de créditos que permita a un propietario construir segundos pisos para arrendar o que instituciones administren un stock de viviendas en terrenos bien localizados para alquilarlas".
Estará dirigido a parejas de perfil vulnerable de hasta 30 años. Permitirá cofinanciar el pago de alquiler por hasta $200 mil y dará puntaje adicional para postular a la compra de viviendas de clase media.
Manuel Valencia / El Mercurio
Página Web - 2013/11/22
Fuente: http://diario.elmercurio.com