Buenos Aires, Salta, Mendoza y Bahía Blanca suman cada vez más sensores de tránsito bajo el asfalto y cámaras de reconocimiento facial para buscar prófugos. También luminarias que “hablan” entre ellas. Una por una, las tecnologías para las ciudades inteligentes.
Unos 126 millones de pasajeros usan mensualmente los diversos medios de transporte público que vinculan a la Ciudad de Buenos Aires con el Conurbano. Otros 23 millones se desplazan en subtes. Unos 27 millones lo hacen en tren. Hay 38.000 taxis. Y crece exponencialmente el número de quienes se desplazan en bici y, ahora, también en monopatín eléctrico. A los 2,9 millones de habitantes se le suma un número similar de personas que llegan de lunes a viernes a trabajar o a realizar trámites.
Y aunque estos números son enormes, están lejos de los de Japón. Tokio, tiene nada menos que 37 millones de habitantes, pero gracias a su histórico uso de la tecnología en espacio urbanos comunes, tiene un día a día mucho más ordenado que Buenos Aires. Ahora, varias ciudades argentinas quieren comenzar a transitar ese camino.
¿Cómo? Con calles con luminarias inteligentes, lugares disponibles para estacionar, un control sostenido del millón y medio de toneladas de residuos que se generan diariamente y los sistemas de seguridad necesarios en lugares estratégicos. El funcionamiento armónico de todas estas aristas está enmarcado en el concepto de Smart City.
Iluminación inteligente
La Iluminación inteligente ya se usa en un tercio de las calles de la Ciudad de Buenos Aires y Rosario. Se compone de una red de luminarias que se pueden configurar digitalmente para que se enciendan o apaguen en horarios o períodos de tiempo determinados. Y que puedan ser controladas remotamente.
Estas luminarias “hablan” -porque informan sobre su estado y se comunican con otros dispositivos- y a su vez son monitoreadas desde una central a través de una red Wi-Fi. Este diálogo es posible gracias a Internet de las Cosas (IoT), un amplísimo campo de la electrónica digital que por estos días protagoniza una revolución transformadora de nuestras vidas y ecosistemas humanos. IoT está dando inteligencia a actividades tan variadas que van desde la iluminación de las ciudades como también el manejo a distancia de dispositivos hogareños, como por ejemplo encender la calefacción una hora antes de volver al hogar, programar el lavarropa a distancia y hasta configurar las tareas de la aspiradora inteligente.
Pero por sobre todas las cosas, este tipo de soluciones brindan a las empresas y organismos, información en tiempo real y datos estadísticos para realizar sus gestiones comerciales en forma ágil y eficaz.
Para que esto suceda, las compañías utilizan diversas plataformas de telegestión y monitoreo.
En el caso de Smartmation, una serie de nodos interconectados son los que facilitan la información a la plataforma. Tiene la forma de una pequeña taza que está por encima de cada luminaria y dentro de ella hay un microcontrolador con software, con firmware, con un GPS y otras funcionalidades que crean las cualidades necesarias para la telegestión.
En cada nodo hay una serie de sensores y funcionalidades basadas en algoritmos, como por ejemplo el de Calendario Astronómico que, de acuerdo a latitud y longitud de la luminaria -la ubicación geoespacial exacta-, envía la orden de encendido y apagado, según varía día a día la luz natural. Por ejemplo, si el cielo se cubre de nubes oscuras que crean la sensación de noche en pleno mediodía, los sensores de luz perciben esa baja de luminosidad y dan la indicación de encendido a la luminaria. Los expertos en sistemas de alumbrado llaman a esa cualidad: el modo operativo mixto de cada luminaria. Y ello dado que el sistema puede enviar un comando que pone a la luminaria en modo Fotocontrol, modo Calendario Astronómico o el Modo Mixto, que armoniza a ambos.
Y hay, además, una cuarta variable -el Modo Manual- por el cual el operador puede encenderla, atenuarla, apagarla, entre otras situaciones. Esta opción es aprovechada también para dar colores especiales a una serie de monumentos de la ciudad de acuerdo a la celebración de cada noche. Entre otros se encuentran, el Obelisco, el Cabildo, el Monumento a los Españoles, Floralis, el Puente de la Mujer, el Planetario, el Palacio Lezama, la Pirámide de Mayo, la Plaza del Congreso, la Torre Monumental de Retiro y la Usina del Arte, en el barrio de La Boca.
En 2013 comenzó un recambio de las tradicionales luces de vapor de sodio y el paso a luminarias LED, que producen un ahorro del 50% a 60% en el consumo de energía y eso representa bajar igual porcentaje del impacto ambiental por emisión de C02. Se levantaron luminarias que consumían 250 watts, más otros 180 watts que consumía el balasto que controlaba frente a los 100 watts de las luces LED. Allí se generó un ahorro del 60% de energía y eso equivale a una baja del 52% en la emisión de dióxido de carbono, que deja así de incrementar el efecto invernadero, según informó la empresa.
La tecnología de Smartmation está presente en un tercio de las luces de Buenos Aires y también en Rosario.
En este segmento otra de las empresas que presta servicio en la Ciudad es Signify. Su plataforma de monitoreo Interact está diseñada para gestionar los datos recopilados por cada uno de los puntos de luz conectados desde diferentes dispositivos externos o sensores integrados a los sistemas de iluminación. Es altamente segura, abierta, escalable y basada en la nube, gestiona y procesa datos generando información relevante, brindando beneficios que permiten tomar decisiones y gestionar mejoras más allá de la iluminación en materia de eficiencia operacional y reducción de costos.
En la Ciudad de Buenos Aires, Signify implementó Interact City que permite monitorear más de 100.000 puntos de luz. El sistema maneja de forma remota el consumo, crea escenas para ahorrar energía, verifica el óptimo funcionamiento de las luminarias y programar eventuales reemplazos en tareas de mantenimiento.
En lo que respecta al deporte, Signify será el encargado de iluminar el nuevo estadio de Estudiantes de La Plata a través de la tecnología Interact Sports convirtiéndolo en el primer estadio argentino de fútbol 100% LED. Esta misma tecnología está presente en el Wanda Metropolitano del Atlético de Madrid.
Reconocimiento facial
Huawei aparece por sobre el resto en la oferta de una variedad de soluciones en materia de seguridad, como por ejemplo cámaras móviles que se despliegan en cualquier sitio, que son utilizadas en los ingresos a las canchas de fútbol de la ciudad o en operativos de saturación. Si bien hace 18 años que viene trabajando en este sector, la compañía china puso el foco puntualmente en reconocimiento facial desde principios del 2016.
Estas cámaras se caracterizan por identificar rápidamente objetivos de alto riesgo como fugitivos y sospechosos potenciales. Toman hasta 16 mil capturas diarias. La clave de este sistema está en su interacción con la biblioteca de rostros para que la Policía pueda identificar, monitorear y aprender sospechosos de manera más eficiente. Según precisiones de la empresa, la identificación de rostros durante el día es mayor a 95%. El sistema de lista negra puede detectar personal y generar alertas en menos de tres segundos.
Por su parte, las cámaras que identifican patentes y placas de vehículos son generalmente desplegadas en entradas y salidas de tráfico, secciones de rutas importantes, comunidades residenciales y estados. Estos dispositivos pueden identificar desde marcas hasta el color del vehículo. Como pasa con las de reconocimiento facial, la información es transferida a la base de datos y almacenada por 60 días. Durante el día, la tasa de reconocimiento de patentes y marcas es del 85%.
“Tuvimos dos instancias que se sucedieron con el Gobierno de la Ciudad. Huawei hizo una donación de equipamiento con tecnología LTE a la Nación -el mismo estándar de conexión que emplea la telefonía móvil con 4G- y por decisión interna de presidencia se cedió esta donación a la Ciudad. Luego a raíz de eso se firmó un acuerdo de entendimiento en el marco de esa donación, para que Huawei adapte lo donado para aprovechar al máximo la utilización de esos recursos trabajando en conjunto con el Ministerio de Seguridad de la Ciudad”, dijo Mauricio Idiart, Director de Soluciones de Huawei Argentina, a Clarín.
El caso Salta, la ciudad monitoreada
El gobierno municipal de la ciudad de Salta quería construir una plataforma de protección de seguridad que tuviera una gestión unificada y de análisis inteligente para desalentar y prevenir la delincuencia. La necesidad de contar con una plataforma capaz de realizar un análisis inteligente de video para que la Policía tenga un recurso más a la hora de monitorear áreas claves, detectar riesgos potenciales y darle batalla al delito.
Para todo eso, en colaboración con Huawei, la Municipalidad desplegó más de 1.300 cámaras fijas con resolución HD distribuidas de la siguiente forma: 1.200 de ellas estaban dispuestas en zonas claves, 10 para reconocimiento facial y 60 para identificar patentes, mientras que las restantes fueron montadas en vehículos para vigilancia móvil.
Las 10 cámaras de reconocimiento facial fueron desplegadas en estaciones de tren, distritos centrales de negocios, calles peatonales, centros comerciales y entradas y salidas de edificios importantes de la ciudad.
Asimismo, el sistema inteligente de video en la Nube interconecta el sistema de Despacho Asistido por Computadora (CAD) en vivo. Los receptores de llamadas y despachadores pueden ver el video en tiempo real para obtener información detallada. Con los datos que se obtienen, el personal de gestión puede realizar un comando eficiente y preciso, lo cual mejora el manejo de incidentes y reduce las pérdidas asociadas con la delincuencia.
Según datos de Huawei, la implementación de este sistema de vigilancia mejoró el índice de Paz Global en Salta (GPI), la tasa de criminalidad, tasa de resolución de casos e hizo que la respuesta a emergencias fuera más efectiva.
Estacionamiento inteligente y sensores ambientales
No solo la Ciudad de Buenos Aires comienza a transformarse cada vez más en una ciudad inteligente. A 653 kilómetros, la municipalidad de Bahía Blanca presentó una solución de Smart Parking (estacionamiento inteligente) de la empresa argentina EXO.
Este desarrollo funciona con un grupo de sensores inalámbricos que informan remotamente los espacios libres para estacionar, los conductores pueden consultar previamente desde su celular los espacios disponibles en el lugar de destino, y realizar hasta el pago desde la misma aplicación móvil de manera segura, a través de un monedero virtual. La solución también cuenta también con métodos de pagos convencionales, como parquímetros o a través de comercios adheridos.
Al mismo tiempo, los municipios acceden a una trazabilidad completa de la gestión del estacionamiento medido, pudiendo consultar la recaudación en tiempo real, el grado de ocupación urbana calle por calle, la labor de los inspectores de tránsito, y el total de multas realizadas, entre otras métricas.
EXO Smart Parking está desplegada con la tecnología en la nube Azure, de Microsoft, y todas las transacciones están aseguradas por tecnología blockchain. La solución se encuentra en uso desde hace un año, con resultados que demuestran una mejora significativa en el sistema de estacionamiento público, según afirmó la empresa.
Mendoza fue la primera ciudad argentina con transporte inteligente, una solución Big Data en la nube que permite a los gestores públicos conocer el comportamiento de los viajantes del sistema Red Bus. Más de 20 indicadores de eficacia económica, de servicio, uso del parque móvil, matriz de origen/destino, entre otras, con filtros por línea, por tipo de pasaje, con visualización geolocalizada permiten la planificación inteligente de las líneas, frecuencias y recorridos.
Luego se sumó, entre otras, Buenos Aires. El sistema más conocido es la app Cuándo Subo, que permite saber en que momento pasará el próximo colectivo, para evitarle al pasajero perdidas de tiempo en la parada. También hay otras apps que permiten seguir los horarios de trenes y subtes. ¿Cómo funcionan? Las unidades (sean colectivos o subtes) llevan sensores que se conectan con satélites de geolocalización. Esa información, cruzada, muestra dónde está exactamente el colectivo. Y cualquiera la puede ver en su celular.
En cuanto a las aplicaciones, la de WesmartPark, recientemente estrenada en Capital Federal, conecta las cocheras libres de hoteles, empresas, desarrolladores inmobiliarios e incluso edificios de departamentos de viviendas, con los conductores que cada vez dan más vueltas por las zonas céntricas intentado conseguir un lugar para estacionar, es otro reflejo de una Smart City.
El sistema es simple. La empresa se asocia con estacionamientos que en determinados momentos del día tienen mucha capacidad ociosa, como por ejemplo los supermercados por la noche, y algunas empresas de día; y les ofrece acercarles clientes por medio de una aplicación.
Los conductores que quieran utilizar este servicio primero deben bajarse al celular la aplicación, que es gratis. Luego se tienen que registrar, y en unos días les llegará una oblea a su casa, que deben pegar en el parabrisas del auto. Esta oblea o sticker es la que conecta al auto con este nuevo sistema en los estacionamientos.
Nivel de contaminación y nivel de agua
Por otra parte, en lo que refiere a sensores disponibles para realizar tareas de monitoreo y telegestión están los terrestres (estaciones meteorológicas o sonómetro) y sensores espaciales (satélites) que a través de la integración de tecnológicas de computer visión y conocimiento profundo (machine learning), permite seguir de cerca el crecimiento urbano, el nivel de contaminación, los focos de incendios y las inundaciones. También controlan la calidad y el nivel de agua en forma continua.
Las estaciones dispuestas en varios puntos de la Ciudad de Buenos Aires -Parque Centenario, La Boca, Avenida Córdoba, entre otras- supervisan en tiempo real la calidad del aire, incluidos el dióxido de nitrógeno, el dióxido de azufre, el monóxido de carbono, el ozono y las partículas (PM2.5 y PM10). Determinar el factor de estrés ejercido por el ruido de la ciudad. Acceden en tiempo real a los distintos parámetros ambientales: temperatura del aire, humedad de aire, precipitación, velocidad de viento, dirección de viento, radiación solar, presión atmosférica, temperatura de suelo, humedad de suelo y mojado de hoja entre otros. Prevenir inundaciones e incendios.
Hernán Mármol / Clarín
Página Web - 2019/09/13
Fuente: https://www.clarin.com/